Google amplió sus restricciones en materia publicitaria en 2016. También ha implantado una serie de mejoras en sus sistemas de detección de «malos anuncios», permitiendo la retirada de 1.700 millones de anuncios para mejorar la red para sus usuarios.
Google redobló sus esfuerzos por hacer cumplir sus políticas de publicidad y proteger a sus usuarios de la “mala publicidad” durante el año pasado. La empresa americana ha mostrado en varias ocasiones su compromiso en el control de los anuncios. El objetivo es garantizar una buena experiencia al usuario en una red de alta calidad. Por ello, según ha comunicado Google, durante 2016 las acciones de vigilancia y las exigencias sobre las políticas de publicidad se vieron reforzadas. Como resultado, el buscador retiró 1.700 millones de anuncios que no cumplían los principios básicos de su política publicitaria. Esta cifra duplica la cantidad de anuncios ilícitos detectada en 2015.
Google, que fue considerada la marca más valiosa del mundo el pasado año, ha contado siempre con una política restrictiva entre sus anunciantes. Sin embargo, con el tiempo fueron intensificando los sistemas de control y haciendo más restrictivas esas medidas. En 2016, Adwords implementó dos nuevas iniciativas: Por un lado, en el mes de julio prohibieron la publicidad de préstamos abusivos y créditos rápidos. En segundo lugar, se realizaron mejoras en los servicios de análisis del contenido de los anuncios, para facilitar y agilizar la detección y retirada de los «malos anuncios».
Malas prácticas publicitarias
Las políticas de publicidad de Google entienden que los «malos anuncios» o la «mala publicidad» no es otra cosa que la publicidad engañosa, falsa o ilícita, y diferencian tres categorías:
- Aquellos que promocionan contenido prohibido: son los que intentan vender productos falsificados, peligrosos o dañinos, las conductas fraudulentas o que inciten al odio, al racismo, la intolerancia…
- Los que se promocionan con prácticas prohibidas en sus políticas como aquellos que ofrecen una información falsa, los que no respetan datos de carácter personales, los anuncios que no pasan o evitan los controles de revisión, aquellos que proceden de sitios web considerados maliciosos…
- Algunos que pueden tener un contenido limitado o restringido en función de distintos aspectos como geografía, cultura, edad o la legislación específica del país entre otros. En esta tipología encontramos ejemplos como los juegos de apuestas, el alcohol, contenidos relacionados con el sexo o la industria pornográfica.
Google lucha contra la mala publicidad para convertir Internet en un lugar mejor y más adecuado para el usuario.
Infracciones más comunes en los anuncios
Entre los malos anuncios que Google retiró en 2016 se detectaron que las infracciones más habituales eran:
- La promoción de productos ilegales, como los 68 millones de anuncios de productos farmacéuticos que fueron retirados por no cumplir la normativa sanitaria o los 17 millones de anuncios relacionadas con prácticas ilícitas de apuestas.
- La venta de productos o servicios a través de medios engañosos o información falsa. Fueron bloqueados 80 millones de malos anuncios que fundamentaron su estrategia en este tipo de prácticas
- Los intentos de engañar al sistema creando una publicidad que parece adecuada pero no cumple con la normativa. Se detectaron 7 millones de anuncios que intentaban engañar intencionadamente el sistema para evitar el cumplimiento de la normativa.
- Los anuncios que buscan la obtención de beneficios en sitios web maliciosos o que ofrecen servicios fraudulentos. En estos casos Google ha emprendido acciones directas contra el sitio web y el anunciante.
Finalmente, Google es consciente de que la lucha contra la publicidad ilícita se debe hacer de forma común. Desde el pasado año está integrado en la Coalition For Better Ads. Se trata de una organización que persigue una publicidad no dañina en el entorno web a la que ya pertenecen otros gigantes de la red como Facebook, y que prevé continuar su lucha contra «los malos anuncios» en el futuro. ¿Tú qué opinas? ¿Se puede realmente controlar y detectar toda la publicidad ilícita de la red?