LinkedIn es una herramienta muy útil a la hora de encontrar empleo, además de una de las redes sociales que más se están desarrollando. Pero no siempre sabemos sacarle todo el partido que deberíamos. Existen 10 errores que muchas veces cometemos en nuestro perfil sin saberlo, y que pueden influir en las relaciones de networking que tengamos en la plataforma.
1. Utilizar un titular que no sea descriptivo
El titular es uno de los primeros elementos que vemos a la hora de entrar en el perfil de un usuario en LinkedIn. Incluso cuando realizamos una búsqueda en la plataforma, es uno de los aspectos que nos sirve para decidir si entramos en esa ficha o no.
Precisamente por ello, es uno de los elementos clave para crear una primera impresión en el resto de usuarios.
¿Cómo debe ser un titular en LinkedIn?
Pero, ¿cómo podemos optimizar nuestro titular? Aquí te dejamos unos tips:
- Utiliza un título descriptivo. Muchas veces los titulares que se usan no explican cuál es el perfil profesional de la persona, por lo que es complicado saber si nos interesa o no contactar con esa persona.
- Incluye las palabras clave por las cuáles quieres que te encuentren. De esta manera, cuando se realicen búsquedas directas en la plataforma tendrás más opción de aparecer en los primeros resultados.
- Emplea iconos o cualquier otro elemento que pueda llamar la atención de los usuarios. Esto dependerá de tus objetivos de la plataforma y de tu perfil profesional. Si estás asociado a algún ámbito en el cual se valore la creatividad puede ser interesante incluir un elemento diferenciador.
2. No utilizar tu nombre
Es importante que utilicemos nuestro nombre completo, sin aplicar diminutivos. Es una manera de demostrar profesionalidad y de conseguir que nos encuentren de manera más sencilla dentro de la plataforma.
Además, el hecho de incluir algunos caracteres especiales en el nombre, puede suponer violar los términos de servicio de LinkedIn por lo que cabe la posibilidad de que se restrinja el uso de nuestra cuenta.
Por otro lado, dado que la plataforma nos da la posibilidad de contactar directamente con otras personas, no es necesario incluir información de contacto adicional como teléfono o email.
3. Tener una foto de perfil no profesional
Al igual que ocurre con el titular y el nombre, la fotografía de perfil es primordial para crear una buena primera impresión.
Precisamente por ello debemos optar por utilizar una imagen profesional, aunque deberemos saber adaptarla en base al ámbito en el cual trabajemos.
Por ejemplo, no tiene porque ser igual una fotografía si trabajamos como creativo que si trabajamos en el sector de la banca.
¿Cómo es la fotografía perfecta para el perfil de LinkedIn?
Para elegir la mejor fotografía para tu perfil puedes seguir los siguientes consejos:
- Es importante que seas reconocible. Utilizar gafas de sol u otro tipo de elementos puede hacer que la gente no te ponga cara.
- Debes estar vestido de manera profesional.
- Sonríe y mira a la cámara. Este tipo de gestos dan mayor sensación de cercanía.
- Utiliza un fondo neutro.
- Usa la misma imagen en todas las redes sociales. De esta manera resultará más sencillo generar tráfico hacia el resto de tus plataformas.
4. No tener una imagen de portada
Otro error bastante común es el de no aprovechar la posibilidad de personalización que nos ofrece LinkedIn con la imagen de portada.
Debemos elegir una imagen que nos represente. Por ejemplo, si seleccionamos una imagen relacionada con aquello a lo que nos dedicamos la sensación de profesionalidad será mucho mayor.
5. Resumen en blanco o sin experiencia actual
El apartado de resumen supone una primera toma de contacto con aquellas personas que pasan por nuestro perfil y, por desgracia, suele ser uno de los grandes olvidados.
Debemos pensar en el extracto como si fuera la clave para conseguir llamar la atención de otros usuarios. Y así conseguir que continúen leyendo nuestro perfil.
Claves para crear un buen extracto en LinkedIn
Existen algunos tips que podemos aplicar para optimizar nuestro extracto:
- Dirígete hacia los visitantes. Escribir de manera impersonal no genera sensación de confianza por lo que debemos evitarlo.
- Se preciso. Explica lo que estás haciendo y hacia donde te diriges.
- Incluye contenido audiovisual si es posible. El ser humano tiene preferencia ante este contenido por lo que, si por tu perfil profesional puedes hacerlo, no pierdas tiempo en ponerlo en práctica. Por ejemplo: artículos, vídeos, portfolios, etc…
6. No tener recomendaciones o habilidades
Muchas veces pasamos por alto la posibilidad de incluir habilidades o recomendaciones que nos ofrece LinkedIn. Pero debemos pensar que suponen una prueba de que lo que estamos contando en nuestro perfil es real, y está apoyado por otros usuarios.
Las recomendaciones son uno de los elementos que se utilizan en muchas plataformas para aumentar las ventas. Entonces, ¿por qué no aplicarlo a esta red social? Intenta contactar con algunas personas que puedan escribir una recomendación sobre ti.
7. No personalizar la url
Otra de las opciones que nos da LinkedIn es la de nos cambiar la url de nuestro perfil para darle un toque más personal. El hecho de optimizar la url incluyendo nuestro nombre y apellidos genera mayor sensación de profesionalidad.
Además también facilita las búsquedas dentro de la plataforma por lo que será más sencillo que otros usuarios puedan localizarnos.
8. Describir nuestro perfil como si fuera un cv
Salvo que estemos buscando trabajo por la plataforma, no es necesario que redactemos nuestra experiencia laboral como si de un currículum se tratara.
Lo ideal es que utilicemos un diálogo en el que nos dirijamos directamente a los usuarios. Explicándoles lo que hemos estado haciendo, en qué podemos ayudarles y tratar de buscar una cercanía con ellos.
Por otro lado, también es un error dejar la información de nuestro perfil sin rellenar. Si vemos un perfil que está prácticamente sin información lo más probable es que nos despierte una sensación de desinterés.
9. No responder ni generar diálogo
No debemos olvidar que LinkedIn es una red social y, como tal, se valora mucho la interacción que llevemos a cabo con otros usuarios. Tardar demasiado tiempo en responder o hacerlo con dejadez hará que la gente se desinterese por nuestro perfil.
10. No personalizar nuestras interacciones
No obstante, debemos ir un paso más allá en nuestras interacciones y preocuparnos por personalizarlas lo máximo posible.
No consiste en contestar por contestar, sino en dedicarle a cada persona el tiempo que se merece y hacerlo de manera correcta.
¿Cómo podemos mejorar nuestras interacciones en LinkedIn?
Existen algunos trucos que pueden ayudarnos a mejorar las relaciones que establecemos en la plataforma. Estos son:
- Dedica un par de minutos a leer el perfil de la persona con la que vas a conectar. De esta manera tendrás algo de información con la que personalizar tu mensaje.
- Utiliza su nombre. Cuando nos dirigimos a una persona por su nombre creamos una mayor sensación de interés y cercanía.
- Realiza comentarios interesantes. Si vas a comentar alguna publicación asegúrate de haber leído el contenido y participa teniendo idea de lo que hablas.
Conclusiones
LinkedIn es una de las herramientas que podemos usar de manera profesional para conseguir contactos, clientes o nuevas oportunidades profesionales.
Precisamente por ello, es importante aprender a optimizar nuestro perfil de LinkedIn y evitar cometer aquellos errores que pueden tirar al traste nuestra estrategia.
Y tú, ¿tienes tu perfil optimizado? ¿Se te ocurre algún otro error que cometamos en esta plataforma?
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